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14 febrero, 2014

Room 237, sobre El resplandor y el sobreanálisis

Yo, como crítico de cine frustrado que soy, amo analizar películas, reconocer sus temas, descubrir los simbolismos y referencias que manejan. Por ejemplo, fue una sorpresa para mi descubrir que, por ejemplo, la genial Drag me to Hell trata sobre desórdenes alimenticios y puedo escribir un ensayo bien largo sobre la interpretación de las relaciones afectivas en May. De hecho, en mi blog Siento un Ki Maligno he dedicado bastantes post al análisis de varios films y videojuegos, es lo mio.

Sin embargo, es increíblemente lo facil que uno puede llegar a sobreanalizar algo con el fin de encontrarle sentido, por ejemplo, me he encontrado con cientos de análisis de Mulholland Drive cada uno más exagerado y contradictorio que el anterior, pero aún así, estos no le llegan a los talones a las teorías que han surgido sobre una de las que muchos consideran como una de las mejores películas de horror de todos los tiempos The Shining (“El Resplandor”).



Stanley Kubrick era un genio-loco y sus películas están dotadas de una “hermosa” complejidad; Su obsesión con los detalles y excéntrica personalidad lo hacen un personaje con unas obras dignas de admirar y analizar, pero pocas de ellas han sido objeto de tan acaloradas discusiones como la mencionada, que en manos de cualquier otro director hubiera sido una historia de fantasmas común y corriente. El libro tiene un tema bastante claro: El alcoholismo. Los sucesos paranormales que ocurren en el Overlook son una metáfora de cómo el alcohol convierte en monstruo a un hombre y destruye a su familia... pero en la película, oh la película...

Entra Room 237, un documental que entrevista a varios... entusiastas? fans? analistas? críticos? (no queda claro) de The Shining para que compartan sus analisis del film, y comienza la locura. Si bien la teoría de que esta película es una metáfora sobre el genocidio de los indígenas norteamericanos ya la había oído antes, estas personas presentan “evidencia de que en realidad trata es sobre el Holocausto Nazi, o que en realidad entre las líneas de la película se esconde la confesión de Kubrick de que el filmó la falsa llegada a la luna en el 69... y esas evidencias son tan absurdas como revelar que un afiche muestra a un esquiador que parece un minotauro, que la máquina de escribir es de marca alemana o que el rostro de Kubrick aparece entre las nubes en una escena (NOTA: es falso, no aparece).



Este film es entretenido por el absurdo al que llegan estas teorías, que apuntan más a fans de Alienígenas ancestrales que a fans de Kubrick, sin embargo debo hacer notar que abrió mis ojos a muchos detalles interesantes que no había notado sobre “El Resplandor”, como la constante presencia de imágenes de águilas o la forma en que la cámara juega con los patrones del piso para despistar a la audiencia.

Yo mismo a veces he caído en la tentación de interpretar detalles nimios en cualquier tipo de obra para darles el significado que yo quiero, pero no hay que pensar tanto, que una cosa es explicar por que los zombies en muchas películas representan el afán consumista y otra muy diferente es decir que Frozen sea en realidad una metáfora sobre la salida del closet de los homosexuales en américa, como muchos andan diciendo por ahí, cierto hay elementos en la película que se pueden interpretar así, pero es en realidad lo que los autores querían decirnos?

1 comentario:

kim dijo...

cual es tu análisis de la pelicula? me quede con las ganas de saberlo. has un post por favor.