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Sinopsis: Florence es una investigadora que en los años 20’s está dedicada a probar que la existencia de fantasmas y espíritus es falsa. Hasta que es contratada para investigar una aparición en un internado que la pondrá a dudar de sus creencias.
Impresión Inicial: Un historia de fantasmas interesante y muy bien narrada, que se pierde un poco en sí misma por culpa de sus giros en su acto final.
Guión y Desarrollo: en un principio estaba seguro que esta iba a ser una versión “de época” de Red Lights, con todo y el tema de desacreditar el espiritismo, pero afortunadamente se convirtió pronto en una historia pura y dura de “casa embrujada”, pero bajo los estereotipos del ya conocido cine de “escépticos que aprenden a creer”.
Florence es un personaje intrigante. Ella es inteligente y bella, pero tiene tras de ella una o varias tragedias que la hacen ser muy triste y melancólica. Es un personaje muy bien trabajado que afortunadamente no esta sola. Rupert Malory, uno de los profesores del orfanato es un veterano de la primera guerra mundial con sus propios fantasmas (metafóricos y reales) y Tom, un misterioso niño que estudia allí. Todos ellos ayudan a que la historia se desarrolle bien en medio de las apariciones y sustos.
Hablando de ello, me gusta que todo el tiempo existe lugar a dudar si todo está ocurriendo de verdad o si no es más que una trabajada broma de los estudiantes que se salió de control. Tiene muy buenos sustos y el fantasma llega a mostrar una apariencia desconcertante con el rostro retorcido que nos puede hacer saltar un par de veces cuando aparece repentinamente.
En el último acto, cuando finalmente todo se revela, tenemos un giro en la trama... “interesante” que nos aporta mucho sobre el pasado de Florence, pero que parece un poco forzado en la trama.
Con esto, o a pesar de ello, The Awakening es una buena historia de fantasmas con buenos sustos, ambientación y personajes, pero no es suficiente para que sea recordada.
Aspectos Técnicos: La historia de fantasmas combina increíblemente bien con el Londres de comienzos del siglo pasado. Los trajes, edificios y actitudes de la Inglaterra Georgiana están representados a la perfección, resultando en un ambiente frío muy adecuado. Los efectos de las apariciones del fantasma también resultan muy buenos, hablando específicamente del resultado visto en el rostro de aquel ser.
Actuaciones: Con grandes actores como Rebecca Hall, Imelda Staunton o Dominic West sabemos que tenemos un producto de calidad. Todos ellos demuestran en cada escena, tras miradas y sonrisas falsas, los secretos y horrores que los agobian. Excelente trabajo, incluso el de Isaac Hempstead-Wright, el niño que interpreta a Tom, que también nos hace preguntarnos qué oculta tras esa mirada de pícara inocencia.
Reflexiones: Este film me hizo recordar una frase que leí en Duma Key, de Stephen King: ”Cuando se trata de recordar el pasado, todos arreglamos la baraja”
Impresión Inicial: Un historia de fantasmas interesante y muy bien narrada, que se pierde un poco en sí misma por culpa de sus giros en su acto final.
Guión y Desarrollo: en un principio estaba seguro que esta iba a ser una versión “de época” de Red Lights, con todo y el tema de desacreditar el espiritismo, pero afortunadamente se convirtió pronto en una historia pura y dura de “casa embrujada”, pero bajo los estereotipos del ya conocido cine de “escépticos que aprenden a creer”.
Florence es un personaje intrigante. Ella es inteligente y bella, pero tiene tras de ella una o varias tragedias que la hacen ser muy triste y melancólica. Es un personaje muy bien trabajado que afortunadamente no esta sola. Rupert Malory, uno de los profesores del orfanato es un veterano de la primera guerra mundial con sus propios fantasmas (metafóricos y reales) y Tom, un misterioso niño que estudia allí. Todos ellos ayudan a que la historia se desarrolle bien en medio de las apariciones y sustos.
Hablando de ello, me gusta que todo el tiempo existe lugar a dudar si todo está ocurriendo de verdad o si no es más que una trabajada broma de los estudiantes que se salió de control. Tiene muy buenos sustos y el fantasma llega a mostrar una apariencia desconcertante con el rostro retorcido que nos puede hacer saltar un par de veces cuando aparece repentinamente.
En el último acto, cuando finalmente todo se revela, tenemos un giro en la trama... “interesante” que nos aporta mucho sobre el pasado de Florence, pero que parece un poco forzado en la trama.
Con esto, o a pesar de ello, The Awakening es una buena historia de fantasmas con buenos sustos, ambientación y personajes, pero no es suficiente para que sea recordada.
Aspectos Técnicos: La historia de fantasmas combina increíblemente bien con el Londres de comienzos del siglo pasado. Los trajes, edificios y actitudes de la Inglaterra Georgiana están representados a la perfección, resultando en un ambiente frío muy adecuado. Los efectos de las apariciones del fantasma también resultan muy buenos, hablando específicamente del resultado visto en el rostro de aquel ser.
Actuaciones: Con grandes actores como Rebecca Hall, Imelda Staunton o Dominic West sabemos que tenemos un producto de calidad. Todos ellos demuestran en cada escena, tras miradas y sonrisas falsas, los secretos y horrores que los agobian. Excelente trabajo, incluso el de Isaac Hempstead-Wright, el niño que interpreta a Tom, que también nos hace preguntarnos qué oculta tras esa mirada de pícara inocencia.
Reflexiones: Este film me hizo recordar una frase que leí en Duma Key, de Stephen King: ”Cuando se trata de recordar el pasado, todos arreglamos la baraja”
- Lo Bueno: Muy buenas actuaciones y ambientación. Las apariciones del fantasma resultan efectivas.
- Lo Malo: No tiene elementos que la hagan destacar realmente sobre otros filmes parecidos.
- Lo Feo: Que va a hacer ese tipo con la cuchilla a su propia piern.... AAAAAAHHHH!!!
CALIFICACIÓN: 7/10
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